Sinopsis
Cuando Jake encuentra unas pistas que conducen a un misterio de realidades y épocas alternativas, descubre un refugio secreto conocido como el Hogar de Miss Peregrine para niños peculiares. A medida que Jake empieza a conocer detalles sobre los residentes y sus habilidades inusuales, se da cuenta de que la seguridad es una ilusión y que el peligro acecha en forma de poderosos y ocultos enemigos. Jake debe descubrir lo que es real, en quién puede confiar y quién es él en realidad.
Crítica
La película está basada en la primera novela homónima de Ransom Riggs, el cual se tropezó con el oficio de novelista de una manera un poco accidental. Cuando tenía 11 o 12 años, su abuela lo arrastraba a tiendas de segunda mano para buscar viejas baratijas y él siempre se quedaba fascinado con la sección de fotos antiguas. Fueron estas fotos las que finalmente le inspirarían para crear el mundo de Miss Peregrine y sus niños peculiares. Y fueron estas fotos lo que sedujo a Tim Burton de la novela de Riggs y finalmente, lo que le condujo al rodaje de la película. Los estudios completaron el equipo con Jane Goldman (Kingsman: Servicio secreto, X-Men: Primera generación) para encargarle la realización del guion.

Tim Burton dando instrucciones a Asa Butterfield en el rodaje de la película
Empezaremos esta crítica aclarando que la película no es perfecta. Se podría argumentar por ejemplo que, debido a que el film está dirigido al ya famoso público “young adult”, el guion comete el error de caer en algunas aclaraciones para los más jóvenes que se podrían tachar de sobreexposición. Por otro lado, también se podría decir que a la película le cuesta arrancar un poco, ya que nos vemos atrapados en la Florida sin brillo de Jake durante más tiempo del que desearíamos. Sin embargo, en este aspecto se podría afirmar como contrargumento que esta es la manera de Goldman y Burton de decirnos que si queremos entrar en el mundo de Miss Peregrine, tenemos que ganárnoslo antes. Y en cierto modo, creemos que sin ese primer tercio en ese mundo soso y rematadamente normal, nos veríamos un poco abrumados por la sucesión de acontecimientos ocurridos en el Hogar de Miss Peregrine y la consecutiva presentación de la dueña de la casa y sus niños peculiares.
Respecto a las peculiaridades de los niños, debemos recalcar que aunque sean atrayentes y seductoras para la historia, su mejor característica es que en su mayoría todas nacen de una creatividad bastante original y de un humor, sí digámoslo, muy peculiar, que las aleja de ser los superpoderes que acostumbramos a ver en los cómics de los famosos X-Men o demás superhéroes. Y no solo de superpoderes vive esta película.
La mejor faceta de la adaptación de Burton es que ha sabido mantener el equilibrio entre la exhibición de las peculiaridades para dar espectacularidad visual y la historia personal del protagonista y su vínculo con su abuelo. Un abuelo que vivió la Segunda Guerra Mundial y cuyos horrores están también muy presentes en los cimientos de la historia y como fondo de la película. Para darse cuenta de hasta qué punto, solo hace falta fijarse en el nombre completo de los monstruos a los que se enfrentan nuestros protagonistas: hollowcast, cuya traducción literal es “espíritu hueco”, pero cuya pronunciación es muy similar a la de holocaust (holocausto). Podría haber sido muy fácil olvidarse de todo eso, y hacer una película de niños con superpoderes que tienen que enfrentarse a monstruos espeluznantes, pero ese afortunadamente no es el caso. El film está lleno de pequeños guiños que hacen el visionado de la película mucho más rico.
Y es que la historia de Riggs, como las buenas historias, tiene muchas capas y se pueden sacar muchas lecturas de ella. Los más jóvenes quizás se queden con el romance entre los protagonistas y la aventura frente a los hollows. Otros quizás se queden con el orgullo con el que los niños exhiben lo que les hace diferentes, en vez de vivir humillados por ser distintos al resto de la sociedad. Y otros, quizás, se queden con la conexión familiar entre el protagonista y su abuelo como un tributo a los seres queridos que hemos perdido.
Respecto al reparto, hay que destacar la maravillosa elección de Samuel L. Jackson para encarnar al líder de los antagonistas a nuestros protagonistas, que hace que este personaje sea mucho más de lo que podría haber sido con cualquier otro actor. Jackson es como una pieza del puzle que no esperabas, pero que sorprendentemente no solo encaja a la perfección, sino que hace resaltar al conjunto. Por otro lado, Eva Green está magnífica en su papel de Alma Peregrine, mostrándonos la faceta tierna y divertida de la protectora de los niños, pero también su lado más tenaz.
Finalmente, no cabe duda de que tanto el argumento, como el imaginario que rodea la novela, le viene como anillo al dedo a Tim Burton, ese cineasta que ya desde bien pequeño se sintió diferente al resto simplemente por encantarle las películas de monstruos. Y aunque deberíamos advertir a los fans acérrimos del cine más característico del director que El hogar de Miss Peregrine para niños peculiares no supone un regreso a ese cine (Eduardo Manos Tijeras, Beetlejuice, etc…), también podemos asegurarles que no hay ninguna razón por la que no puedan disfrutar de esta película.
La verdad es que yo solía ser una gran admiradora de Tim Burton, pero creo que la última película de él que fue auténtica es Big Fish.
Del resto ya me parece una parodia de él mismo. Es una pena.
Me gustaMe gusta