Afortunadamente y no con poco trabajo, las mujeres han ido conquistando con paso lento pero firme el mercado musical. Hoy ya no es excepcional ver bandas lideradas por féminas, donde son ellas las que llevan todo el peso musical.

Esta vez queremos acercarnos a siete mujeres, simplemente por ser poseedoras de voces excepcionales. Voces absolutamente diferentes. Voces que producen escalofríos y recorrerán cada centímetro de tu cuerpo. Voces que sólo necesitan un segundo para rozarte y atravesar cada poro de tu piel. Géneros musicales, procedencias, edades y estilos absolutamente dispares con un único nexo en común: la belleza de su timbre vocal y ser mujeres.

ROSALIA

Acercarse al flamenco son palabras mayores. Con unas claves sonoras restrictivas, aptas para minorías eruditas, hay algo que tiene la voz de esta mujer que trasciende todo. Uno se sienta. Respira el silencio. Y simplemente se emociona al escucharla. Una voz llena de angustia, pasión y desgarro. Voz y guitarra como únicos elementos con los que Rosalía y Raül Refre han parido un maravilloso trabajo titulado Los Angeles.

“Quejíos”, susurros y mucho talento, para crear un nuevo flamenco. Contemporáneo y purista a la vez, Rosalía respeta con humildad la tradición más profunda. Ahora cierra los ojos. Dedícale unos minutos a paladear cada una de las palabras de sus letras. Y siente. Y si una lágrima te asoma …sonríe. Revolver las entrañas es el maravilloso poder de la música.

PASCAL PINON

El frío y la luz gélida de Islandia nos trae siempre artistas llenos de elegancia y fragilidad. Pocos sonidos tan dulces y sensuales como los de esta banda formada por las gemelas Ásthildur y Jófríður Ákadóttir. Armonía absoluta y complicidad genética que se unen en dos mentes que se hacen una y que comparten un modo totalmente personal de entender la música.

Paisajes llenos de bruma, hielo, luz velada y emociones llenas de melancolía y delicadeza. Minimalismo, experimentación y una identidad propia. Un trabajo que simplemente es una oda a la belleza. La de dos voces, sin nada más. Exquisitamente naif, enciérrate en casa y disfruta de la simplicidad absoluta.

MIYA FOLICK

Californiana y actriz antes que cantante, su expresividad y dramatismo están presentes como parte intrínseca e indisoluble de su personalidad musical. Con una voz melancólica, rasposa como si se arrastrase en la arena y llena a su vez de serenidad, su estilo electro- pop- folk le ha permitido investigar a través de diferentes géneros y texturas sonoras.

Algunos eruditos ya la han etiquetado como la nueva Cat Power. Sea cierto o no, lo que es incuestionable es que tu corazón se derretirá al escucharla. Buscad un momento y regalaros hoy 3 minutos y 43 segundos. Son los que dura su maravilloso tema Strange Darling.

VAGABON

Esta joven cantante y multi instrumentista de tan solo 24 años, no escribe letras autobiográficas. A pesar de ello Embers, canción con la que abre su primer LP Infinite Worlds, habla de la vida de una joven inmigrante de color moviéndose a trompicones en la jungla neoyorquina. ¿Quizás sea esta realidad la suya?

A su primer concierto sólo fueron dos personas. Hoy miles de ellas la siguen en sus directos. Vagabon canta, susurra y grita con una voz absolutamente reconocible. Temas que se mueven entre armonías suaves, ritmos potentes o distorsión. Sintetizadores, batería, bajo y una voz llena de lamentos, crujidos, ruido, calma, emoción y mucha, muchísima verdad.

ROSEMARY FAIRWEATHER

Esta vez las dulces armonías vienen desde Toronto, Canadá, para enseñarle al mundo que también con los susurros se construye música. Una voz blanca, cristalina y delicada, como la porcelana de su blanquecina piel. Una voz que nos canta al oído para desde lo pequeño crear un sonido muy grande.

Synth pop lleno de lamentos, sensualidad y conmovedora belleza. Una voz tímida y sugerente, íntima y adictiva, que te arrastrará hacia el tocadiscos para escucharla en bucle. Su último disco, You Talk Too Much, es la perfecta compañía para bailar una tarde cualquiera descalza en soledad.

GABBY YOUNG

Inquietante, diferente, extravagante y absolutamente maravillosa. Gabby Young se ha acercado al teatro, el circo y el cabaret siempre desde lo musical. Con su peluca coloreada de rojo brillante y un lunar enorme pintado en la mejilla, siempre ha cuidado su impresionante voz, escondida a veces tras el trabajo puramente dramático.

En 2006 sufrió un cáncer de tiroides que marcó trascendentalmente su vida. Lejos de cuestionarse su carrera, entendió que sólo la música daba sentido a su existencia. Una mujer valiente, rompedora y llena de fuerza, que hace lo que le da la gana con la voz, alcanzando tonos imposibles y registros que no parecen terrenales. Ya estás tardando demasiado en escucharla.

SHONA FOSTER

La última de las voces de hoy es una propuesta radicalmente diferente. Y es en esa diferencia en donde radica su magia. Esta joven inglesa, toca la guitarra y canta como un ángel venido desde las profundidades del infierno para enamorarnos. Cuando la escuches descubrirás una de las mejores voces que has oído en mucho tiempo.

Su disco Love and War lo tiene todo. Oh Patience es un tema fuerte, arriesgado y desgarrador, de esos que te quitan la respiración y que crítica y profanos han alabado sin pudor. Bad Intentions, Be Bold, No.34 y Where We’ll Go, terminan de hacer de este disco algo realmente sublime. ¿Necesitas algo más para darle al play?