Al norte de la ciudad de Colonia, Alemania, entre edificios de ladrillos y grafitis, podemos dar con el Palladium, un edificio que ha pasado de ser un taller mecánico a una gran sala de conciertos donde el jueves pasado, Nick Murphy, también conocido como Chet Faker, llenó el edificio de gente y música digna de conocer. Con un ambiente que recuerda a la Malasaña madrileña, las barbas y gorras para atrás se amontonaban en la cola para ver a músico australiano.

Después de bastante tiempo de espera, siempre manteniendo el suspense, con el público ya ansioso, la banda saltó al escenario. Y es que Murphy no estuvo solo en él. Aunque nos tenga acostumbrados a un sonido más electrónico, Nick pudo mezclar perfectamente la música en directo del bajo, batería, guitarra y piano con sus ritmos y samples electrónicos.

Unos músicos que fueron mostrando su calidad durante todo el concierto y que hicieron que el sonido y el ambiente fuese el mejor.

Y para empezar, sonó Gold, uno de los grandes temas de Chet Faker que comenzó con el fortísimo sonido de bajo resonando por toda la sala. Le siguió No Advice y 1998, que dio comienzo al movimiento de hombros y de caderas que no dejó de repetirse durante todo el show. Así sonaba Built on Glass en directo, su álbum debut que dio comienzo al recorrido musical por el que nos llevó el músico.

Cambiamos de Chet faker a Nick Muprhy y comienza a sonar algo nuevo. Con Weak Education nos presenta Missing Link, su último álbum y el primero dejando atrás su alter ego Chet. Siguió con I’m Ready, con la base electrónica siempre con la batería de fondo y acompañada por el gran bajo. The Trouble With Us fue la siguiente, una gran colaboración con Markus Marr que puso a todo el público a bailar con un sonido más funk y soul, con la guitarra y sus riffs de fondo. Una buenísima canción con la que es imposible no sumarse y seguir el ritmo.

Y comenzamos con la primera improvisación. Los sonidos psicodélicos inundaron la sala, cada músico concentrado en su instrumento y dejando la música fluir. El momento de cerrar los ojos y disfrutar había llegado (aunque muchos prefirieran hablar más alto que la música).

Y entre improvisación e improvisación llegamos a To Me, una canción que recoge perfectamente el sentimiento y disfrute de las improvisaciones anteriores y lo convierte en emoción. Con un ritmo más lento, actúa de balada, mueve cuerpos y ensancha pulmones. Nos dio tiempo para respirar y disfrutar.

Volvemos con Marcus Marr y su EP Work con el que después de The Trouble With Us, escuchamos Killing Jar, seguido de un Forget About Me que nos trae de vuelta a Missing Link y los ritmos repetitivos.

Y después de otro momento de improvisación, Murphy al piano, ya se podían oir pequeñas pistas de que la siguiente era Talk Is Cheap, y se notaba que la gente la estaba esperando. Una que no puede faltar en un concierto suyo. El público cantó y acompaño a Murhpy desde el principio. Los aplausos no pararon un segundo hasta que comenzó Fear Less. El ambiente estaba totalmente calmado, los grandes bailes habían parado y ahora era solo momento de escuchar.

Y para cerrar, después de la calma de la última parte del concierto, escuchamos Medication, uno de sus nuevos singles que volvió a subir la energía. Y con el bajo sonando tan potente como siempre y, después del clásico “big love” seguido de la ciudad de turno para agradecer y despedirse del público, la banda y Nick Murphy dejaron el escenario después de llenar Colonia de sentimiento y ritmo.

Con su claro protagonismo en el escenario (la banda siempre alejada e interactuando lo mínimo) el artista mezcló canciones de su etapa como Chet Faker con sonidos del nuevo Nick Murphy, intercalando con improvisaciones que solo sumaron al total de la ecuación dando como resultado una gran transición, un sonido que solo daba ganas de cerrar los ojos y sumergirte en él, y mucho baile.

Una magistral voz en directo que no falla y una banda que sorprende añaden a la base electrónica de este músico, que no ha hecho más que crecer y progresar en la música, con bases y ritmos de soul siempre presentes, es desde luego un placer escuchar en directo.