Seguramente, cuando escuchamos su nombre, en lo último en lo que pensamos es en las películas que vienen de allí. Islandia es un país en el que lamentablemente escasea la producción cinematográfica. Sin embargo, a lo largo del nuevo siglo hemos podido comprobar que, aunque se produzcan pocos títulos, estos son de una calidad envidiable. Dagur Kári, Rúnar Rúnarsson, Ragnar Bragason o Baltasar Kormákur son algunos de los directores que han catapultado el cine islandés al panorama internacional. Además, pese a los pocos títulos propios, son muchas las superproducciones que han elegido rodar en la tierra de hielo y fuego atraídos por el contraste de sus paisajes (Oblivion, Juego de tronos, Prometheus, Star Wars Episodio VII: el despertar de la fuerza).
En 2015 se estrenaron tres películas que cosecharon varios éxitos en distintos festivales con gran acogida por parte de la crítica y público y que sirvió para dejar patente que el nuevo cine del país nórdico ha venido para quedarse.
(Fúsi) Corazón Gigante
Director y guionista: Dagur Kári
Dagur Kari dirige esta cinta que triunfó en el Festival de Tribeca haciéndose con el premio a mejor película y mejor actor (Gunnar Jónsson). Un relato intimista sobre las falsas apariencias con matices de crítica social. La bondad y ternura de un hombre que a sus 43 años aún no ha conocido el amor, que vive con su madre y que juega con figuras a recrear batallas de la Segunda Guerra Mundial con una niña del vecindario. Fúsi, con casi 2 metros de altura y más de 150 kilos transmite una verdad con miradas y silencios que convierte al espectador en su amigo para el resto de la película.
Sparrows
Director y guionista: Rúnar Rúnarsson
Premiada con la Concha de Oro en el Festival de San Sebastián. Sparrows es una mirada sobria a la fase más dura y confusa de la adolescencia. Ari (Atili Oskar Fjalarsson) es un joven de 16 años que debe volver al lugar donde nació (un pequeño pueblo situado en los fiordos occidentales) a vivir con su padre, al que hace años que no ve. Además, tiene que volver a cimentar su relación con éste, y con el resto de la gente del pueblo. Un relato veraz donde confluyen temas como el primer amor, el alcoholismo o la amistad, todo ello envuelto por el marco de un marco frío y gris.
(Hrútar) Rams
Director y guionista: Grímur Hákonarson
Dirigida por Grímur Hákonarson y galardonada con el premio a Mejor Película en la sección Un Certain Regard del Festival de Cannes. Narra la historia de dos hermanos que llevan 40 años sin dirigirse la palabra y deberán limar sus diferencias para salvar a su ganado. Quizás la película más reflexiva de las tres recomendadas. Planos generales y estáticos de parajes inmensos que refuerzan la sensación de soledad, y que muestran la rutina y dilación de los interminables días en un recóndito valle de Islandia.
La similitud entre estas tres películas es que saben tratar temas muy humanos de manera implacable. Sin adornos y sin caer en lo melodramático, pero con un realismo mágico que las diferencia del resto de producciones del género. Echadles un vistazo y decidnos si os han conquistado los cineastas islandeses tanto como a nosotros.