El K-Pop o pop coreano (como nos gusta llamarlo a algunos) es un fenómeno que ha venido para quedarse, de eso no hay ninguna duda. Son multitud los grupos que ya han arrasado en todo el mundo. Seguro que muchos de sus nombres te suenan: BTS, Got7, Red Velvet, EXO, Blackpink… Precisamente es de este último grupo del que venimos a hablar.
El grupo, formado por Jisoo, Lisa, Rosé y Jennie lanzó el pasado 14 de octubre de 2020 su documental Blackpink: Light Up the Sky en Netflix. Gracias a él pudimos descubrir infinidad de cosas que, seguramente, los Blinks, (nombre que le ha otorgado el grupo a su fandom) ya sabían.
Un duro camino hasta la cima

Si hay algo que destaca en este grupo es su gran diversidad, algo que las hace únicas.
Blackpink: Light Up The Sky nos proporciona una visión mucho más cercana hacia ellas y hacia sus orígenes, haciendo hincapié en la variedad cultural que existe en el grupo y es que, Jisoo nació en Corea del Sur y en 2011 se convirtió en una de las afortunadas aprendices de YG Entertainment, la discográfica que las llevaría a lo más alto en 2016. Jennie también nació en Corea del Sur, pero a una edad muy temprana se mudó a Nueva Zelanda, donde vivió hasta que decidió participar en los castings de la discográfica. Rosé nació también en este país, aunque terminó viviendo en Australia, mientras que Lisa nació y vivió en Tailandia hasta los 14 años.
A través del documental de Netflix, podemos ver el arduo proceso que tienen que pasar los aspirantes o «trainees» si quieren convertirse en artistas algún día. En el caso de las chicas de Blackpink, pasaron de 4 a 6 años preparando su voz, su baile y su desenvoltura en el escenario 14 horas diarias y descansando un día cada dos semanas.
Lo que está claro es que el esfuerzo mereció la pena y es que, Blackpink se convirtió en el primer grupo femenino en formar parte de YG Entertainment tras la disolución de 2NE1, debutando el 8 de agosto de 2016 con su sencillo Square One, compuesto por las canciones Whistle y Boombayah, ambas producidas por Teddy Park, su productor y amigo. De hecho, en más de una ocasión podemos ver cómo juntos trabajan mano a mano para crear sus temas y cómo, para alguna de ellas, esto resulta un proceso de lo más íntimo y personal.
Desde el primer día su éxito no ha hecho más que aumentar. Al fin, el 15 de junio de 2018, lanzaron su primer EP, Square Up, con canciones como Ddu-Du Ddu-Du, que logró arrasar en todo el mundo, obteniendo 36,2 millones de reproducciones en su videoclip en las primeras 24 horas.
Su fandom es cada vez más potente, por lo que pronto terminaron haciendo un tour mundial, el Blackpink World Tour (In Your Area). Ninguna se imaginaba hasta dónde serían capaces de llegar, para ellas era y es un sueño hecho realidad, “No sabía que nos volveríamos tan famosas”, reconoce Lisa. Su estilo musical pronto fue llamando la atención de grandes artistas como Dua Lipa, con quien colaborarían en Kiss and Make up, Lady Gaga, en Sour Candy o Selena Gómez, lanzando juntas Ice Cream, una canción escrita, entre otros, ¡por la mismísima Ariana Grande!
Un grupo de lo más especial
Como ya decíamos, Blackpink es un fenómeno único. Después de tantos años de trabajo, la girlband se subió a los escenarios del Coachella durante el verano de 2019, convirtiéndose en el primer grupo surcoreano en lograr tal oportunidad, algo que ni ellas mismas se creían: “Me preocupaba que no fuera a venir mucha gente a nuestro concierto”, decía Rosé y, la verdad es que no podía estar más equivocada. Durante su actuación interpretaron multitud de canciones, como Kill This Love, Playing with Fire o As If It’s Your Last, temazos que no dejaron indiferente a nadie.
El K-Pop lleva algún tiempo pisando muy fuerte y, en el caso de Blackpink, como dice Jennie al final del documental: “Esto es solo el principio”. Así que, no preocuparse, todo pinta a que disfrutaremos de la girlband durante mucho más tiempo. Blackpink In Your Area!