Regencia Británica de 1819. El país está sumido en una apocalíptica guerra contra los zombies surgidos del comercio más allá del Atlántico. En estas circunstancias, los nobles ingleses intentan seguir con sus costumbres y tradiciones. Entre ellos destacan el Señor Bennet y su esposa que quieren ver casadas a sus cinco hijas a las que ha entrenado en el arte de matar y en las artes marciales de oriente, siendo las más capacitadas Elizabeth y Jane. Las hermanas pronto conocerán a cuatro apuestos caballeros: Mister Darcy, Mister Bingley, Parson Collins y George Wickman. Pero antes de que las relaciones fructifiquen un gran secreto será revelado. Secreto que puede cambiar la guerra contra los zombies.
Orgullo y Prejuicio (1813) es una novela de la escritora inglesa Jane Austen. Gran conocedora de las costumbres y cambios de su época, la importancia de su obra logró trascender consiguiendo inspirar libros, seriales de radio, televisión y películas. Y entre versión y versión nos encontramos con la que publicó Seth Grahame-Smith en 2009 y a la que tituló Orgullo, Prejuicio y Zombies reinterpretando el clásico de Austen con las hermanas Bennet machacando zombies, dando lugar así a un mashup de los más particular. El libro pasó a novela gráfica con los artistas Tony Lee y Cliff Richards, y ahora da el salto a la gran pantalla con esta adaptación cinematográfica.
Hemos de confesar que nos enfrentábamos con cierto escepticismo a la película, pero sabiendo que el guión está coescrito por el mismísimo David O. Russell (The Fighter, Silver Linings Playbook, American Hustle) y para nuestra sorpresa contaba con buen elenco, nos acomodamos en nuestra butaca y sin ningún tipo de esperanza en que lo que íbamos a ver nos gustase, nos relajamos y debemos confesar que nos llevamos una grata sorpresa y aunque no es la gran película que creemos podría haber sido, tiene momentos notables.
Lo más negativo es que se queda en tierra de nadie en algunos momentos, no sabe si es una película romántica, una de zombies o una comedia. De hecho, nos encantaría que O. Russell no sólo hubiese firmado el guión, sino que también la hubiese dirigido como se quería en los inicios del proyecto, ya que lo que más se echa en falta es la dirección de alguien que hubiera sabido mezclar a la perfección esos ingredientes que si bien son bizarros, son de lo más atractivos.
En contraposición, destaca la fotografía, vestuario y maquillaje. Sorprende que con el escaso presupuesto (a penas 20 millones de dólares) con el que contó la producción consigan una ambientación tan fidedigna. Aunque, como se suele decir, el talento no se compra con dinero y si se tiene poco presupuesto, pero tu director de fotografía es Remi Adefarasin (Elizabeth, Match Point), la cosa cambia. Sobresale también la banda sonora firmada por Fernando Velázquez.
Pero si hay algo que sobresale por encima de todo y hace que la película no caiga en el desastre, son las interpretaciones de sus protagonistas.
Lily James (Elizabeth Bennet) en un contundente y sorprendente cambio de registro con respecto a su Cenicienta en la película de Kenneth Branagh. Aquí Lily nos da a una joven firme, dura y totalmente preparada para la acción y el mando. Su hermana y compañera para el combate es Bella Heathcote (Jane) que también lleva a cabo un cambio de rol similar al de Lily James, pasando de la tímida institutriz de Sombras tenebrosas a toda una Jane Bennet, casi tan preparada como Elizabeth a la hora de liquidar “podridos”. ¿Y qué sería Orgullo y Prejuicio sin nuestro querido Señor Darcy? Si bien en el imaginario popular el mejor Darcy siempre será Colin Firth, Sam Riley (On The Road) nos da un más que decente Darcy; tan comedido que al final somos una Elizabeth Bennet más y acabamos enamorándonos de él.
Nos gustaría destacar en especial en el apartado interpretativo a Matt Smith (Doctor Who) interpretando al insoportable y cómico primo Parson Collins y, sobre todo, a Lena Headey dando vida a Lady Catherine de Bourgh. Lástima que la podamos disfrutar durante tan pocos minutos dentro de la hora y cuarenta y siete minutos de duración de la película. Daría para un spin off sus aventuras como la mayor exterminadora de zombies del Imperio Británico.
En conclusión y parafraseando a Mister Darcy “bastante tolerable, debo decir, pero no lo suficiente hermosa”.