Con él, las sonrisas están más que aseguradas. Se ha encargado de hacerse un hueco en nuestros corazones, gracias a su forma de ser y a cómo es capaz de transmitirlo a la pantalla. Un director que entiende la felicidad del espectador y pretende explotarla hasta el final. Así es Taika Waititi, y así lo muestra su recorrido tras las cámaras.
Tras la llegada del nuevo milenio, el director se deja entrever entre las sombras del cine, con proyectos pequeños reflejados en cortometrajes. Sin embargo, uno de los primeros (Dos coches, una noche) le abrió las puertas de Hollywood, con una nominación a los Oscar en 2004.
Aún sin que el éxito se le subiera a la cabeza, continuará con los proyectos de su tierra natal, en Nueva Zelanda, adentrándonos en el mundo de las series y, lo que más nos interesa en este caso, sus primeras películas. En 2010 llegará Boy y su primer título trascendente: Lo que hacemos entre las sombras (2014), basado en un corto de nueve años atrás.

En ella, se nos muestra a modo de “falso documental” la vida de tres vampiros que son compañeros de piso en la actualidad. A modo de comedia de terror, se nos presentan situaciones absurdas y desternillantes en lo absurdo que resultan todas las situaciones. Sumado a ello, con unas brillantes interpretaciones de la mano de Jemaine Clement, Jonathan Brugh y el mismo Taika Waititi.
Tan solo dos años más tarde se estrenará Hunt for the Wilderpeople, la historia de un joven que se ve obligado a vivir en una granja aislada donde se encontrará… con muchos problemas inesperados. Pero el verdadero reconocimiento llegará gracias a una de sus tareas más imprevistas, pero más reconocidas por los fans de Marvel: el lavado de cara de Thor.

Con el estreno de la tercera película de la triología del superhéroe, Thor: Ragnarok (2017), el director le da una vuelta de tuerca a las anteriores, sembrando las risas y la comedia en esta saga (y en todo Marvel se podría decir). Un aspecto muy necesario para el personaje y que consigue revivir lo que parecía perdido.
De hecho, toda esta técnica de mezclar a la perfección la acción con un guión desternillante será seguido por el resto de títulos posteriores como Guardianes de la Galaxia, aunque no estén dirigidas por él. ¿Casualidad que le hayan dado la tarea de encargarse de la cuarta entrega? Lo dudo muchísimo.
Y es que, su camino por la comedia aún no ha terminado. Le han seguido otras series y proyectos en los que, a día de hoy, se encuentra trabajando. Taika Waititi es un director que, además de hacerte sonreír, cuenta con un ingenio en sus palabras de los que pocos pueden lograr. Que, a pesar de que muchas veces lo absurdo inunde la pantalla, el mensaje cale más allá y se busque la profundidad de los personajes, el llegar al público y, sobre todo, hacerles pasar el mejor rato de su vida. Con Taika está asegurado.
Pingback: Cine de terror para el confinamiento (Parte II) | Dosis de terror