Estados Unidos, Gran Bretaña, España… son zonas donde se concentra el origen de las series que solemos consumir. Pero, ¿y si os decimos que existen otro tipo muy diferentes, pero al mismo tiempo igual de cojonudas? Se llaman doramas, y tienen su origen en Corea del Sur.

Sabemos lo que estáis pensando. ¿Qué pueden tener estas series que superen a la de títulos archiconocidos? Evidentemente, nada. Pero prometemos que os enamorarán de una forma honda y totalmente diferente. 

1. Hello, My Twenties!

Aunque a primera vista esta serie pueda parecer el típico drama, se aleja bastante de lo normalmente visto en los doramas coreanos. Bajo la historia de cinco universitarias que viven en la misma residencia («Belle Epoque»), la serie hace un despliegue de temas tan crudos como la violencia de género, el suicidio, la depresión y la muerte.

Todo bajo la mirada de cinco personajes femeninas que, además de fuerza, devoran la pantalla. Además de demostrar que, al final, lo más importante que uno puede tener es la pura amistad.

2. Descendientes del sol

Una medico y un capitán de las Fuerzas Armadas se conocen y comienzan a salir, aunque la relación no termina de cuajar. ¿Qué pasará cuanto, tiempo más tarde, vuelvan a reencontrarse en un contexto de conflicto? Descendientes del sol nos plantea un drama romántico desde un contexto y punto de vista totalmente diferentes. Aclamada por el público, la serie vale por sí misma gracias a su originalidad, la química entre sus personajes y la tendencia natural a dejarte el cuerpo sin agua (eso sí, con sonrisa permanente).

3. W – Two Worlds

Una relación entre dos mundos: el real y el ficticio. Ese es el planteamiento que la W hace desde el momento cero. Oh Yen Joo es la hija de un famoso dibujante, que un día desaparece de repente tras decidir que va a matar a su personaje estrella.

Por una serie de sucesos inesperados, Yen Joo se verá trasladada a este mundo ficticio donde conocerá a Kang Chul. Allí decidirá buscar la razón principal de por qué estos dos mundos han decidido «unirse». Con una gran carga fantástica, la producción supone otro soplo de aire fresco al género de los doramas, y una joya que cualquiera podrá disfrutar.

4. She was pretty

Todos sabemos que el tema de la belleza, especialmente en Corea, puede resultar controvertido. A pesar de contar con algún elemento criticable en este sentido, She was pretty se alza como la serie que busca desmitificar el elemento de la mujer «fea» como sinónimo de poco exitosa. Además, nos presenta una figura femenina de armas tomar, que luchará para conseguir su objetivo ante cualquier cosa.

Y acentuar aquello que decía Potts de «antes de juzgar tienes que llegar hasta el corazón«.

5. Doctors

Si te gustan más los líos amorosos y los dramas de hospital (muy al estilo Anatomía de Grey) que a un tonto un lápiz, Doctors es la opción perfecta. Con una historia complicada a sus espaldas, la protagonista se reencontrará quince años más tarde con figuras de su pasado que, creía, había dejado atrás. Y si el hype os come… lo siento: no se puede desvelar nada más.

6. Madame Antonie

Una divina, admiradora de la difunta «Maria Antonieta», se dedica a predicar la fortuna del resto de personas. Un día se topará con un cínico psicoanalista, cuyo objetivo principal será el de demostrar que el amor verdadero no existe. ¿Qué ocurrirá cuando ambas filosofías, totalmente diferentes, se enfrenten? Con una temática novedosa, este dorama resulta una buena opción de domingueo en el sofá y para aquellos más interesados en todo lo relacionado con la mente.